El silencio no puede
seguir siendo mi lenguaje
Pero solo encuentro estas palabras irreales
Jorge
Teillier
Una noche de neblinas mentales
entre vapores oníricos
presenciarás al demiurgo oscuro.
Mientras del campanario vendrá un solo tañido,
un sonido eterno.
El Ifrit hablará entre profecías;
Libérate del sonido
para siempre
De esos gorjeos de
pájaros a medianoche
Del campanazo
ensordecedor
Ingresa la mano a
través del agujero oscuro y toma la llave
Mientras un gemido agónico del otro lado
se comprime buscando libertad, anhelando salir de la pesadilla.
Esperemos que solo sea un mal sueño
que alguien abra la ventana al amanecer
y que la llave no sea tu propia garganta.
Apuesto por esa ventana luminosa y amplia al amanecer. El poema está cargado de dramatismo e intensidad.
ResponderEliminarSaludos.